Internet y Navegadores

INTERNET 

    Curiosamente internet se creó en Estados Unidos  como una red de comunicaciones con fines militares, concretamente en plena Guerra Fría con la Unión Soviética, para distribuir la información de forma descentralizada. Surgiendo así la red "ARPA" que no tenía nodos críticos, es decir carecía de marco jurídico y en ella la información se dividía en pequeños paquetes, se trasmitía y luego se volvía a montar en el destino, esta división dificultaba la llegada de la información ya que todos los paquetes no tenían porque seguir el mismo camino.

    Una vez finalizada la guerra pasó a depender de las autoridades civiles   y a su vez se fueron añadiendo nodos, y poco a poco fue creciendo hasta poder unir en un punto geográfico tres universidades por ejemplo, convirtiéndose en cada vez una red más desorganizada hasta ser lo que conocemos hoy en día.

    Hoy, Internet nos proporciona una fuente inagotable de contenidos. Es un medio de comunicación y expresión sin límites, un espacio interminable donde alojar archivos, un canal comercial, un sistema ideal para el control de dispositivos a distancia y según avanza el tiempo mucho más innovador.

NAVEGADORES

    Un navegador es un programa cliente instalado en el ordenador del usuario que le permite acceder a un servicio remoto. En este caso, a una fuente de información  e interpretar el lenguaje HTML, el código que se utiliza para estructurar y desplegar una página web y sus contenidos como  párrafos, una lista con viñetas, o imágenes y tablas de datos. Esa información se localiza en servidores que proporcionan alojamiento a os creadores de las página web.

    Cuando nosotros buscamos una dirección, este programa se encarga de lanzar una petición a través de la red al servidor que contiene dicha página y es ese, quien nos envía la página a nuestro ordenador y podemos visualizarla en el navegador. Todos funcionan de esta manera, lo que les diferencia es el manejo, la fiabilidad o la capacidad para visualizar contenido multimedia.

    Existen otros programas clientes que acceden a contenidos o servicios de Internet por el ejemplo el Messenger, que accede a través de Internet a un servidor donde se ofrece el servicio de chat. Otros programas son Outlook y Outlook Express que acceden al correo electrónico y gestionan los mensajes.

    Un ejemplo de navegador es Internet Explorer, navegador de Microsoft que viene gratuito con Windows.

    Todo navegador va memorizando las páginas a la que accede el usuario, facilitando volver a una página visitada anteriormente y a su vez da la opción de guardar las páginas que necesite. 

    Navegando en Internet nuestro ordenador no esta totalmente seguro, por lo que se debe evitar  páginas sospechosas o desconocidas, que pueden estar plagados de virus. Para proteger nuestro ordenador debemos seleccionar el nivel de seguridad, más alto así será más restrictivo y seleccionar que cookies queremos permitir.

    Una cookie es un fichero de datos que una página web le envía a tu ordenador cuando la visitas que se utiliza para recordar accesos y conocer hábitos de navegación, hace que las páginas web puedan identificar tu ordenador, y por lo tanto, si vuelves a entrar a ellas podrán recordar quién eres y qué has hecho antes dentro de ellas. Pero también tienen una parte negativa ya que tu información puede ser utilizada por terceros y te pueden llenar a anuncios y promociones. Hay dos tipos, las cookies temporales y las permanentes. Las cookies temporales sólo permanecen en tu navegador hasta que te vas de la página web, por lo que no se quedan instaladas en tu navegador u ordenador. Las cookies permanentes o persistentes, en cambio, se quedan en el disco duro de tu ordenador para que la página que las instala pueda leerlas e identificarte cada vez que vuelvas a visitarla. Suelen tener fechas de expiración.